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En el debate sobre los atentados de París y medidas antiterroristas que ha tenido lugar esta mañana en el pleno del Parlamento Europeo, los socialistas españoles han reclamado no mezclar este asunto con el debate sobre extranjería, inmigración o refugiados. En cambio, han pedido poner el foco en cómo prevenir que ciudadanos europeos sean reclutados por organizaciones terroristas, en intervenir los contenidos en la red que instigan los extremismos violentos, congelar sus activos a escala europea o reforzar la cooperación policial.

Nota de Prensa de los Socialistas en el Parlamento Europeo

“Los atentados que más nos han dolido, los de Madrid, los de París… no fueron perpetrados por personas que vinieron en avión, sino por personas que habitan entre nosotros, por eso es imprescindible reforzar la comunidad europea de inteligencia, para saber cómo actúan en las redes, cómo mueven globalmente su dinero, cómo podemos congelarlo y confiscarlo y cómo podemos defender nuestros valores sin rendir nuestros derechos y nuestras libertades”, ha declarado Juan Fernando López Aguilar, portavoz socialista en la comisión de Llibertades Civiles, Justicia e Interior del Parlamento Europeo.

Además de insistir en el derecho de los europeos a una respuesta legislativa que garantice y refuerce su seguridad frente al miedo y la indefensión, el eurodiputado ha abogado por aumentar la cooperación con las comunidades islámicas, “que también sufren y combaten el terrorismo”. Y en este sentido ha denunciado que “la austeridad y el derrumbamiento de las políticas de educación, inclusión e integración en barrios marginados y en colectivos especialmente vulnerables ha hecho que muchos jóvenes nacidos europeos se muestren dispuestos a embarcarse en esa enloquecida espiral de violencia destructiva y autodestructiva y se declaren dispuestos no solamente a matar si no a morir matando”.

Por su parte, el vicepresidente del Grupo Socialista en la Eurocámara, Enrique Guerrero, ha lamentado “lo poco que hemos aprendido y avanzado en la prevención y en la lucha contra el terrorismo” una década después de que Madrid sufriera el mayor atentando en territorio europeo. “Seguimos sin compartir la información necesaria para atacar el terrorismo, tampoco hemos hecho suficiente para cortar las fuentes de la financiación de los grupos terroristas, sin olvidar que las políticas de austeridad han dañado todavía más la educación, la integración, los servicios sociales y los servicios públicos”.

Durante su intervención, Guerrero también ha hecho referencia a la incapacidad de articular una respuesta europea. “Hoy el Consejo nos presenta unas medidas que apoyamos, pero muchas ya estaban al alcance de la mano de los Estados miembros y no la han utilizado. Existe una estrategia, un coordinador en la lucha antiterrorista, Europol, Eurojust, COSI… utilicemos estos instrumentos, porque si solo tenemos una respuesta nacional los terroristas utilizarán los vacíos de seguridad que hay entre los Estados, si solo reaccionamos ante los atentados, ellos determinaran la agenda y el momento que nos hace más daño”.

Una amenaza global 
Elena Valenciano, presidenta de la subcomisión de Derechos Humanos en la Eurocámara ha lamentado que ahora que “necesitamos una Europa más unida que nunca, la derecha nacionalista y la extrema derecha de este Parlamento intentar sacar ventaja de esta situación”.

“Los refugiados no son los que trafican con el petróleo de Isis”, ha recordado Valenciano, que ha subrayado que la clave es la seguridad, pero no es la única clave. “No demos a los terroristas el trofeo que más anhelan, que es justamente el fracaso de nuestro sistema de libertades, el fracaso de nuestra democracia y nuestra complicidad en la destrucción de los derechos humanos universales. Si hacemos eso, estaremos dándoles la victoria a los terroristas”.

Valenciano ha recordado durante su intervención que el terrorismo yihadista no amenaza únicamente a la ciudadanía de la UE. “No hay consuelo para las madres francesas cuyos hijos fueron asesinados en París la noche del 13 de noviembre, o en Madrid en 2004, ni tampoco los cientos de miles de madres sirias, iraquíes, tunecinas, nigerianas, malienses... Estamos ante una amenaza global y como tal la única respuesta inteligente ha de ser global”.